domingo, 20 de diciembre de 2020

'El Cid', la serie de Amazon Prime Video



Sin que sirva de precedente, vamos con una videocrítica de una serie en el canal #UltimoEstreno de Youtube. Ya sabéis que en #UltimoEstreno no hablo de series de televisión ni plataformas.
Lo hago en esta ocasión porque me llama mucho la atención que alguien se gaste actualmente una brutalidad de pasta para hacer una cosa con #elcid como protagonista, un personaje politizado que el facherío utiliza para hablar sobre la unidad de España (en el siglo XI no existía España, pero en fin) y los del otro lado consideran casposísimo y un matamoros, con lo incorrecto que hoy día resulta pensar en esa posibilidad. ¿A alguien le resulta interesante ver la historia de Rodrigo Díaz de Vivar durante casi seis horas y además los cinco capítulos de la primera temporada solo son del personaje de niño y sus primeros escarceos bélicos?
Preconizo fracaso de espectadores, aun incluso algunos viéndola por aquello de las batallas al estilo 'Juego de tronos' y eso. Ojalá me equivoque, porque la serie es solvente, la pasta se nota y el nivel interpretativo de actores como Carlos Bardem, Elia Galera o Juan Echanove es excelente. Echanove está maravilloso, contenido (¡es posible!), con rostro de senador o emperador romano aunque haga de obispo. Si a alguien ya puestos se le ocurre producir una serie sobre Espartaco, que lo contrate como sucesor de Charles Laughton.
Además, me enoja lo cainitas que somos en España. Si esta producción fuera americana o británica, estaríamos babeando.
De la banda sonora de Gustavo Santaolalla ni hablo en el vídeo. Prefiero no hacerlo porque no me van los bajos acústicos ni los samplers en la edad media. Y ni mucho menos desaprovechar los personajes y sus estupendas opciones para 'componerles sus temas'. Elegir a Santaolalla ha sido uno de los mayores errores de la serie, una pena.
#elcid la podéis ver en Amazon Prime. Y ya no hablo de más series. Durante las casi seis horas de los cinco capítulos podía haber visto tres películas de John Ford de las que aun tengo esperándome, que para eso hizo más de doscientas.

Enlace a la videocrítica en Ivoox: https://go.ivoox.com/rf/62693144

domingo, 13 de diciembre de 2020

Veinte años no son nada... Por los cojones



Los jóvenes de hoy no hacen aquellas cosas de décadas pasadas: crear asociaciones de autoenriquecimiento, de crítica social utilizando vehículos como la música, el cine, la cultura en general.

Se perdieron en el tiempo aquellas revistas hechas de andar por casa donde cabía casi todo para estimular el conocimiento, las de instituto a través de talleres de los que salían chavales pensando que el periodismo era la profesión más maravillosa del mundo (me acaba de entrar la risa floja).

No sé cuántas veces quedaron conmigo muchas de estas asociaciones juveniles o esos institutos y colegios para que les hablara del cine, de la radio. He perdido mucha documentación y el otro día, rebuscando material para mi futuro libro, me encontré con unas hojas desperdigadas de una revista de chavales del año 2000 que fueron a la radio a entrevistarme. Eran cuatro páginas dedicadas a mis opiniones, pero solo he encontrado la portada y fragmentos de varias. Entre ellas ya rajaba de lo insufrible de 'La milla verde', del timo de 'El sexto sentido' o de que el cine estaba desapareciendo. Creo recordar que entre mis típicas barbaridades que decía ponía a parir a Ridley Scott, 'Matrix' y la falta de recursos para hacer cine mientras subvencionaban mierdas. Y leo que exaltaba 'Los diez mandamientos' por lo que supuso para mí de pequeño... amor condicionado por la infancia a un falsuno mamotreto, qué le vamos a hacer.

Veinte años no son nada, que decía Gardel. Por los cojones.




viernes, 11 de diciembre de 2020

'El paciente inglés'


Soy raro. Llega la Navidad y se me viene a la mente una enormísima secuencia de 'El paciente inglés', aquella del tipo con la gaita y la gente cantando 'Noche de paz' mientras László y Katharine se han largado para darle fuerte y flojo.

Es maravilloso como Anthony Minghella la rueda, dejando que sean los primeros planos de ella los que hilvanen el momento, desde el broche al collar, el sujetador, la combinación, el rostro de ambos... Tanto el director como el compositor Gabriel Yared son conscientes de la importancia de generar con un prolongado silencio la expectación en el espectador, y luego desatan el brutal momento de pasión armonizando el villancico con el tema musical principal de la película.
Ya aprovecho para recordar otro enorme instante, el de László llevando entre sus brazos a Katharine en el desierto, desesperado. Ahí Gabriel Yared sí mete el tema, de fondo, como el que no quiere la cosa. Él le dice a ella que no hable, otro primer plano del colgante, Katharine deja caer su rostro sobre la mejilla y el hombro izquierdo de László, éste rompe a llorar desesperadamente como a la vez rompe el grandioso tema musical del filme.
Da igual que durante el resto de la película Ralph Fiennes siga poniendo cara de estar creyendo que interpreta a Amon Goeth o que la historia de Juliette Binoche con el indio me importe una mierda. Solo por estas dos secuencias ya me retuerzo en el más absoluto placer del cine maravillosamente hecho.

miércoles, 9 de diciembre de 2020

'Mank'. Esto es Hollywood


‘Mank’ (podéis verla en Netflix en estos días) es una película coral aunque gire en torno a un guionista gamberro como fue Herman Mankievicz. Personajes del mundo del creciente Hollywood dorado pululan por su metraje y son fundamentales para entender la historia de quien ideó ‘Ciudadano Kane’, una de las joyas del cine. Por eso los espectadores tenemos una gran ventaja y un inconveniente: la ventaja es que estamos ante una película cuidada como toda obra de su director, David Fincher, de buena factura, con un montaje complicado para quien visiona el filme pero admirable, que va más allá de la simpleza de quienes prejuzgan porque la catalogan como un producto sin interés, al tratarse al fin y al cabo de la historia de un tipo obligado a escribir el guión de una película, recluido y clandestinamente borracho. En ‘Mank’ hay mucho más, entre otras cosas el reflejo de lo mejor y lo peor de Hollywood, desde el desprecio a los técnicos del cine –especialmente a los incómodos por sus incorrecciones políticas- a reconocer que esos mismos denostados se merecen la gloria concediéndoles los premios más importantes del mundo en esto del cine.
El videorreportaje en el que os hablo de ‘Mank’ que acabo de subir al canal #UltimoEstreno de Youtube vuelve a invitaros a tomar asiento, echaros una copa previamente y disfrutar durante un buen rato. Os cuento porqué ‘Mank’ es tan buena pero se os hace algo pesada, dónde está el problema. Os hablo de quién es quién, de cómo Fincher recuerda rodando a Scorsese, a sus guiños como los planos rodados a la manera de Orson Welles cuando éste aparece en pantalla y las agudísimas referencias a la política en un texto para cada actor de bastante altura. También os cuento cómo la banda sonora no cumple con su verdadera función (aunque lo parezca) y algo muy interesante: cómo están reaccionando aquellos herederos de los personajes que protagonizan el filme o han tenido directa relación con ellos. Por ejemplo, ¿sabéis que
Dorothy Herrmann
, la hija del compositor Bernard Herrmann, autor de ‘Ciudadano Kane’, ha escrito en facebook mostrando su disgusto con la película? ¿Que
Constance Bongi
, la hija de Herber Stothart, compositor de ‘El mago de Oz’, le contesta porque ella fue amiga íntima de la mujer de Herman Mankievicz? Pues todo eso os lo muestro en este nuevo videorreportaje en #UltimoEstreno. ¡No os lo perdáis!

domingo, 6 de diciembre de 2020

El 'Belén del arquillo' de Sevilla



Hace muchos años que, entre las ciudades que marco con una X para visitar en Navidad, está Sevilla, que en realidad es para visitarla todos los días. La Navidad realza la belleza de las ciudades que ya de por sí lo son. Este año echaré de menos sus calles exornadas, su ambiente y sus belenes.
Entre estos últimos el llamado 'Belén del arquillo' que cada año monta el Ayuntamiento de Sevilla. Es un motivo navideño fundamental en la Navidad sevillana, en el que se detienen miles de personas para contemplar lo monumental de sus figuras y el buen gusto de esta representación que contribuye a embellecer el edificio consistorial y a recordarnos que el verdadero sentido de esta fiesta se encuentra en esa representación de un Jesús, desnudo e indefenso, recostado entre paja y heno, que vino a cambiar el mundo con su mensaje de paz pero de combate contra la opresión, de caridad pero de justicia social.
También debe ser que, curiosamente, una buena parte de las figuras del 'Belén del arquillo' son exactamente iguales que las que tengo yo heredadas de mi padre, que tantos años fueron expuestas al público y que volverán a ello en la Navidad de 2021 si la providencia quiere. Las mías son, obviamente, más pequeñas, pero no dejas de identificarte con ellas.
Supongo que tanta gente que admira el belén sevillano no tendrá en su casa reproducciones de estas imágenes, así que imagino que quienes aprecian esta iniciativa del Ayuntamiento de Sevilla que existe desde hace ya un buen número de años es porque les agrada de verdad, y eso constituye un atractivo más, e importante, de la Navidad hispalense.
Algunas cosas curiosas de este Belén: en 2016, la dirección de Parques y Jardines puso en marcha un taller de manualidades en torno a él, en el que los niños podían hacer sus propios nacimientos en el mismo espacio verde del monumental. Cientos de pequeños participaron de esta iniciativa municipal.
En 2017, el Ayuntamiento cometió un leve retraso en el montaje del 'Belén del arquillo' que puso en alerta a los sevillanos. ABC lo recogía así:


Este año no podre(mos) ir a Sevilla, me da la a mí la espina. Si es para contribuir a para este virus, que así sea. Me quedaré en San Fernando, que tiene un Ayuntamiento maravilloso, recién restaurando y aun sin volver a abrir sus puertas, que para estas fiestas presenta unos muñecos preciosos en su fachada y un Papá Noel visitable en su interior.
Me acordaré con nostalgia de Sevilla. Y su 'Belén del arquillo', claro está. Solo como curiosidad final y concluyente: el alcalde de Sevilla es el socialista Juan Espadas. Este año ha colocado el Nacimiento incluso antes de la iluminación de sus alrededores. Seguro que piensa que esta representación también "dinamiza y genera empleo" en la ciudad.

lunes, 30 de noviembre de 2020

Tres años de #UltimoEstreno en las redes



En este mes de noviembre que ahora finaliza se han cumplido TRES AÑOS desde que comenzó su andadura el canal-programa #UltimoEstreno en Youtube, heredero en las redes en cierta manera de aquel inolvidable 'Último Estreno' durante casi dos décadas en la radio que marcó una época y que muchos aun recuerdan y me comentan.
Aquella cercanía, frescura del directo y maneras de hacer radio se perdieron hace mucho tiempo porque los tiempos han cambiado en la comunicación a nivel global, así que #UltimoEstreno en internet se parece poco. El contacto con los oyentes-seguidores (al menos por el momento, jeje) no existe, pero a través de las videocríticas y los videorreportajes seguimos hablando de cine, que es lo importante, y de una manera muy particular como siempre se hizo. Estoy más moderado, lo sé, me lo decís continuamente, debe ser la edad, pero cuando falta el contacto directo de la gente no es lo mismo... Todo se andará ;-)
En tres años tenéis a vuestra disposición en el canal-programa #UltimoEstreno casi doscientos vídeos de contenido muy diverso y algunos de ellos casi con 200.000 visionados. Gracias de corazón por estar ahí y, si no estáis suscritos aun, os invito a hacerlo pinchando en este enlace. Es gratis, no supone nada para vosotros, os alerta de los nuevos vídeos que se suban y ampliamos la familia de amantes del cine en #UltimoEstreno. Además, ya sabéis que también estamos en Facebook, Instagram y Tik-Tok y en mi twitter personal.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

San Fernando, atrapado en el tiempo



Si Harold Ramis -era uno de aquellos famosos cazafantasmas de la icónica película de Ivan Reitman, por cierto- hubiera vivido en San Fernando, se habría percatado de que se encontraba en el lugar perfecto para rodar una versión de su película 'Atrapado en el tiempo', absurdo título del original 'El día de la marmota', que es como todo el mundo conoce aquella ingeniosa película sobre el tipo que se levanta cada mañana con el mismo panorama por delante.

San Fernando es una marmota gigante que no despierta de su sueño ni tiene visos de hacerlo. Me pongo a buscar municipios con actuaciones pendientes para su desarrollo y encuentro decenas, cientos de ellos, pero la lista se me acorta cuando hablamos de generaciones de jóvenes -y no tanto- que nacieron en los años ochenta y noventa del siglo pasado y hoy les mencionas proyectos perdidos en el tiempo y te ponen la misma cara que si les hablaras de Franco. Ni lo conocieron ni les interesa. Y eso es muy triste. Y no me refiero a Franco.

Leo en Diario de Cádiz que la playa de Camposoto no se desafecta militarmente. No sé qué de una respuesta parlamentaria. Quiero decir una más de tantas, respuestas parlamentarias sobre San Fernando hay para sobrepasar 'Guerra y paz'. Otra de la playa. A estas alturas, siglo XXI, y seguimos enzarzados en líneas epistolares políticas sobre si se tiran bombas o no en Camposoto.

Mi cuñada Cristina tiene 25 años. Es decir, nació casi a la vez que se logró que Defensa de entonces claudicara para que la ciudad contara con unos metros de su (lejana y aislada) playa. Cuando ahora le cuento lo de la (otra) respuesta parlamentaria, me mira con los mismos ojos que me ponía mi gato cuando yo sobrevaloraba su entendimiento. Aquí no se trata de menospreciar a Cristina y su capacidad de discernimiento, solo es cuestión de que ella ya es una mujer, ha transcurrido toda una generación en años y la chica no alcanza a entender que en casi tres décadas se siga hablando de lo mismo que escuchó cuando comenzó a tener constancia de donde vivía. Ha mamado La Isla día tras día en su joven vida y, si no lo impide la ruina que estamos padeciendo todos en esta tierra desaprovechada, continuará viviendo aquí. Al menos creo que es su intención. Y ha leído no sé cuántas veces lo de las "respuestas parlamentarias" sobre Camposoto, de la misma manera que los reproches políticos y peleas ridículas en las que unos a otros achacan lo logrado sobre lo debido. Yo desafecté y tú no. Yo no liberé pero puse meaderos de madera para que alivien los bañistas. Tú tenías la carretera hecha un cisco, yo he hecho un par de rotondas por las que durante dos meses y medio esto es la ostia de gente entrando para darse chapuzones (ya eso del aprovechamiento económico lo dejamos para otro momento), pero durante el resto del año circulan un puñado de coches para que algunos extravagantes vengan a un cubilete de cemento desde donde se ven los chorlitejos patinegros. Y así sucesivamente.

Me refiero a que ahora Cristina lee otra "respuesta parlamentaria" sobre algo que nadie ha sido capaz de alumbrar en treinta años, que es toda una vida generacional. Y lo más probable es que mi cuñada lea en la prensa, en unos días, que alguno de estos ponen a parir a los otros porque los polvorines de Fadricas están abandonados y Punta Cantera es un erial, cuando iba a significar el desarrollo de aquellos vestigios militares, de la zona norte hasta la ahora desgraciada Casería de Ossio, en donde quieren intervenir y puede cebarse la mala suerte, esa que dice que todo está muerto porque nadie con poder se ha remangado jamás, pero lo único que está vivo ahora resulta que se lo quieren cargar.

La animosa y joven Cristina pasará a ver en prensa, días después, discusiones sobre "el aprovechamiento de la-figura-universal-del-flamenco", y volverá a salir, casi otros treinta años después, otro marmótico asunto: Camarón de La Isla. Tres décadas y otro cubilete con mercedes al exterior, como una oficina de Movisa Renault. Punto y final.

El otro día me preguntó para qué sirve eso que llaman "la mesa del Turismo", y como obviamente soy el doble de mayor que ella, me bastó recordar cuantas veces desde los años noventa del siglo pasado se ha venido hablando del turismo en San Fernando sin resultados concretos, cuántas redacté noticias al respecto en los medios en los que trabajé. Cruzo los dedos porque no paseemos un día por la calle Real, esa por donde nos prometieron hace ya una quincena de años que circularía un tranvía, y Cristina me pregunte por Casa Lazaga. Creo que en breve tocará nota de prensa de algún partido sobre ella, ya llevan varios meses sin orear el tema.

Tranquilos que no pretendo que nadie se corte las venas con tanto negativismo. Es que, simple y llanamente, mi cuñada lleva toda su vida escuchando Camposoto, Fadricas (polvorines y polígono, que esa es otra), Camarón, la Magdalena, la Marina, Tierra, (¡ay, el CEFOT!), turismo y estoy que no me llega la camisa al cuello esperando que tome una decisión: la conformista, la "resignada" tal cual los detallistas del Mercado Central dicen haber adoptado tras ¡otras cuantas décadas más! esperando el remozado de sus puestos, o buscar alguna tierra prometida donde Harold Ramis no pueda rodar la segunda parte de una tristísima película hacia ninguna parte.