Hay trabajos, como el Eye in the Sky, inmortales. Sus temas como Sirius, Mammagamma, Old and Wise,... se encuentran fuera de la influencia y el devenir del tiempo. Aquella obra maestra me dio pie a seguirle la pista al grupo, The Alan Parsons Project, y comprarme en el mismo vinilo que conservo con cariño en mis estanterías, el The Turn of a Friendly Card, Vulture Culture, Stereotomy, Gaudí, Freudiana y los trabajos anteriores a Eye in the Sky como I Robot o Tales of Mistery and Imagination.
Interesado por aquella excepcional música, descubrí que el grupo lo conformaban dos cerebros privilegiados: Alan Parson y Eric Woolfson. El primero era el ingeniero de sonido de la joya de Pink Floyd The Dark Side of the Moon, y el segundo llegó a ser realmente el que más canciones compuso del dúo-Project. El conocido como 'Sonido Parsons' jamás podría haber existido sin la participación de Eric Woolfson, que terminó por emprender su carrera en solitario más que por desavenencias con Alan, por inanición como grupo tras veinte años dando trabajos excepcionales para la posteridad. Tras Freudiana, el último álbum doble del dúo dedicado al investigador de los sueños, Eric tuvo intereses escénicos y transformó el disco en una gran obra teatral que representó endiversos países, entre ellos con gran éxito en Alemania, durante meses.
El cáncer no entiende de música ni de obras maestras. Se ha llevado a Eric Woolfson a los 65 años. Seguramente Alan estará muy afectado a pesar de que cada uno de ellos emprendió carrera en solitario hace años. Pero, al igual que Pink Floyd, ¿qué es Roger Waters en solitario sin cantar The Wall o David Gilmour sin tocar en su guitarra Wish You Were Here?
No dejéis de disfrutar de esto como sentido y emocionado homenaje personal a Eric Woolfson: