viernes, 8 de mayo de 2009

Comienza 'Radio Último Estreno'

Yo sí tengo claro -de verdad, no como otros- que las nuevas tecnologías se apresuran a acabar con los formatos conocidos hasta ahora y que hay que aprovecharlas al máximo. Y tras casi 18 años en radio, no me he resistido a quedarme sin aquel bendito vicio, de manera que desde este 8 de mayo comienza su andadura la nueva Radio Último Estreno, la emisora en internet on line que he creado para todos los lectores de este blog y los que, aun interesándole menos el contenido escrito del espacio que tienes ahora frente a ti, sí desean durante el día darle gusto a sus oídos sentado frente al ordenador.

El nombre de esta emisora radiofónica en internet -de carácter cultural y sin ánimo de lucro- se lo debo a mi programa de cine Último Estreno que estuvo en antena durante numerosos años con una gran aceptación entre los oyentes de toda la provincia gaditana, Huelva y Sevilla. Si modesta era aquella emisora que tan extraordinarios profesionales aportó al mundo de las ondas más allá de la frontera gaditana, ahora Radio Último Estreno también es un ejemplo de producto modesto que estará dedicado principalmente a las bandas sonoras de cine aunque tendrán cabida también otros estilos de música, entrevistas, reportajes, etc.

En estos días estaremos emitiendo en pruebas intermitentemente. Si quieres escuchar la radio y estamos en antena, al pinchar sobre el banner de la parte superior a la derecha de este blog se te abrirá una ventana denominada 'Shoutcast D.N.A.S. Status' con las características de la emisora -entre ellas que se emite en estéreo con una extraordinaria calidad digital-, el título del tema que en ese momento se ofrece y una 'song history' en la segunda pestaña, es decir, el listado de temas ofrecidos durante las horas anteriores. Para oír Radio Último Estreno, pulsa en 'Listen' (oír en inglés), se te abrirá tu programa de audio... y a disfrutar. Hoy viernes tocan bandas sonoras durante casi todo el día para probar que funciona el streaming y en próximos días, ya avanzados, seguiré centrado en el apasionante mundo de la música de cine ofreciéndote lo que te concedí durante tantos años en las ondas, ahora en otro formato con todo un campo de experimentación por delante. En estas horas además ya estoy incorporando los micrófonos para presentar los temas y realizar programas concretos especiales a la antigua usanza de Último Estreno. Con peticiones telefónicas incluidas. Pero tranquilidad, todo se andará en estos días y la parrilla de programación la ofreceré diariamente en el blog. Si quieres solicitar algún tema también habilitaremos a partir de este lunes 11 de mayo un correo electrónico para peticiones que será 'radioultimoestreno@hotmail.com'.

Bienvenidos a la nueva emisora que te sorprenderá. No sé donde puedes oír hoy día las bandas sonoras que me resultaba todo un placer ofrecerte en Último Estreno: descatalogadas, clásicas, nuevas, de televisión, diálogos en versión original,... Creo que disfrutaré más que vosotros porque ahora sí sé dónde las vas a tener.

Hoy viernes ya puedes oír temas de James Horner, John Williams, John Barry, Danny Elfman, John Frizzell o Bill Conti, entre otros.

lunes, 4 de mayo de 2009

Televisión pública sin anuncios

Vamos poniendo las bases para un sistema de gestión coherente y, consecuentemente, eficaz en la televisión pública. El Gobierno de este país parece decidido por fin y tras años de debate a suprimir los anuncios publicitarios del ente público. En una lectura algo primitiva, lo lógico sería que la televisión de todos se mantuviera gracias a los impuestos, que para eso lo pagamos, u otro tipo de acuerdos ajenos a la habitual usanza publicitaria que emplean las privadas. Una visión primitiva pero básicamente acertada.

Llevo décadas preguntándome y escribiendo qué sentido tiene la publicidad en las cadenas públicas. Obviamente, nadie aporta una respuesta convincente y las que se dan se pierden en sofismas. La única válida es la que conduce al esperpento actual. Es decir, introducir a la televisión pública en la salvaje competencia entre cadenas para lograr más audiencia y hacerle sombra a otras con lamentables programas en numerosas ocasiones pero que no pagamos de nuestro bolsillo, de manera que si no me gusta me paso a otro canal y santas pascuas. Alguna mente corta decidió que TVE tiene que competir con Tele 5, Antena 3 u otras para sacar pecho, cuando la televisión pública debe ser realmente un servicio con derechos y deberes. Derechos para todos y deber de no costarnos las sangrantes cantidades de pérdidas que registra en cada ejercicio anual presupuestario. Porque si TVE dispone publicidad pero las cuentas salen en negro y no en rojo, entonces al menos alguien tendría una remota excusa para justificar el dislate de ver desde condones a papel del culo, pasando por gaseosas, mutilando los créditos de las series y las películas. Pero no. Las cuentas son el fiel reflejo de haber introducido al ente público en una batalla en la que jamás debió de estar.

La sanidad pública no tiene horarios en función de si hoy la necesitamos diez mil españoles y mañana sólo tres mil. Los servicios públicos deben existir en su plenitud como servicios que son sin necesidad de contar quienes lo utilicen. Es obvio que los programadores no pueden hacer parrillas a espaldas del público para cosechar resultados pírricos, pero de ahí a introducir un servicio público en una vorágine absurda...

Yo quiero una televisión pública sin anuncios y saneada gracias a la mágica proporción presupuesto-calidad. Me importa un rábano que TVE no compre Ángeles y Demonios para emitirla a los cuatro meses de su estreno en cine, porque no es misión del ente público ofrecer este filme. Para eso que compitan los magnates de las plataformas con su dinero. Resulta lamentable ver que alguna televisión privada ofrece más contenido cultural y programas de ocio de calidad que la propia pública y con presupuestos mucho más bajos. Y todos tenemos ejemplos de magnificos programas en la televisión pública que podían haber servido de modelo para un servicio desmadrado por los delirios de grandeza competitiva de políticos e incluso funcionarios.

Quiero una tele pública sin anuncios y con los créditos de las películas y de sus series. En otro ejemplo de despropósito, hemos asistido durante estos últimos días a todo un ejemplo de catetismo televisivo, cuando en la franja horaria de 16 a 18 horas se ha querido emitir tres telenovelas, una de ellas líder de audiencia en su franja horaria y española como es Amar en tiempos revueltos y, para que según algún lumbreras "no se pierda tiempo", han cortado los créditos finales de esta serie donde figuran todo el equipo técnico, patrocinadores de vestuario, decorados, atrezzo, etc. para empalmar con otro producto. Si yo fuera el empresario de alguna de las firmas que disponen el mobiliario o los vestidos de época de la serie y cortan mi nombre para meter una telenovela sudamericana o lo que fuera, me negaría a pagar el contrato publicitario. La serie termina con la última letra de los rótulos y para eso pagan y para eso la hacen posible. Ya en los años 80, el director italiano Federico Fellini denunció a la RAI por suprimir los créditos de sus películas cuando eran emitidas. Es una absoluta falta de respeto a los profesionales que hacen realidad lo que vemos y a las firmas patrocinadoras. Y en el mismo caso, aún más grave, padecen las emisiones de películas. Basta con ser un técnico de los que figuran en esas letras que tanto despreciamos para desde nuestra casa denunciar a la cadena televisiva que osa amputarme mi esfuerzo y sacrificio.

Esas son cosas de televisiones públicas serias. No sé si la veremos algún día así.

martes, 28 de abril de 2009

Cerdos, gripes y paro

No sé si preocuparme más por la gripe porcina o por la pandemia que padece España a causa del desempleo. Viendo la cantidad de individuos/as pendientes del vestido de Carla Bruni en su visita a ZP (le recuerdo a los despistados que viene acompañando a un tal Nicolás Sarcozy, que dicen que es el que realmente parte el bacalao en un país de por ahí afuera llamado Francia), parece que muchos no tienen la más mínima intención de desazonarse por una u otra razón.

Lo de la fiebre por los cochinos parece que hay que tenerlo en cuenta, pero lo veo lejano. Quizás Dios me castigue y cuando termine de escribir empiece a soltar mocos como Linda Blair en El exorcista, pero por el momento los pulmones no me duelen por algún fenómeno tusivo. Es el alma el que me rechina cuando veo a vecinos en paro y escucho a través de las paredes conversaciones que te erizan el vello y sin necesidad de poner la oreja, porque llega un momento en el que la desesperación sale del pecho para convertirse en clamor que no deja de ser un estéril lamento de desahogo.

Tampoco hace falta estar pendientes de las familias de tu entorno. A una buena amiga la echan en un par de días de una agencia de noticias simplemente por haber mostrado su desacuerdo con la nueva política de pago de las piezas de las informaciones que redactan y las medidas implantadas por algún cerebro privilegiado especialista en cargarse la vida laboral de seres humanos. Y un par de grupos de comunicación de peso ya se han puesto de acuerdo para cerrar cabeceras en el mapa andaluz y no hacerse más daño en una guerra que van a perder los soldados a pie de batalla y no los ministros ni presidentes. Entre esos acuerdos hay algunos que afectarán a muchos periodistas gaditanos que ni siquiera saben nada de esto y tienen hasta final de año para buscarse la vida. Mientras y en otros grupos de apenas unos miles de lectores según el último EGM, y con un mensaje ya manido y trasnochado, se sigue exigiendo más a los periodistas mal pagados con amenazas de mandarlos a la calle. Porque al final la culpa del cierre la tendrán los periodistas. Como la culpa de que Alemania se quedara reducida a cenizas hace casi setenta años la tuvieron los judíos, los rojos, los masones y los americanos. La mentalidad hitleriana se lleva hasta el final de los días, hasta cuando se aprieta el gatillo, hasta cuando se deje de accionar el botón de la rotativa. Genio y figura. Mantengo que los periodistas tenemos la culpa de muchas cosas por permitirlas y unos cuantos deberían de no dormir tranquilos. Pero esos desgraciados y tristes chupaculos no suman lo suficiente como para culparlos de la existencia de monstruos sin más escrúpulos que construirse chalets a pie de playa e irse de putas.

Vamos camino de cinco millones de parados y esto se escapa de las manos. Resulta curioso que José María Aznar vuelva a mostrar sus delirios mesiánicos y salga a la palestra para decir que con él no habría desempleo en España. Curioso y tocapelotas que es, porque si esta crisis mundial se gestó en su momento, fue entre otras cosas porque algunos decidieron llevar a cabo una política internacional absolutamente equivocada. Tanta soberbia no beneficia al partido que llegó a presidir, que recorta puntos ante la desesperación del personal. En una interesante conversación que mantuve el sábado, un amigo y joven empresario gaditano me llegó a decir que si las cosas siguen así no sería malo que el PP volviera a gobernar, ya que asevera que ello 'movería' la economía y crearía una sinergia distinta en la circulación del dinero y su destino. Crítico con los sindicatos a los que califica como 'el cáncer de la democracia', me insistió en que empresario y trabajadores necesitan un equilibrio entre derechos y deberes que no ofrecen ahora las centrales sindicales. Hace falta encontrar el sistema, pero entonces estaríamos poniendo en entredicho este tipo de democracia. Y eso espanta a todos.

lunes, 27 de abril de 2009

Aritz Villodas, un nuevo valor en Úbeda'09

La V edición del Festival Internacional de Música de ‘Cine Ciudad de Úbeda’, que se celebrará del 16 al 19 de julio en la localidad jiennense, amplía su nómina de invitados después de haber anunciado la presencia de compositores de renombre como Joe Hisaishi, Christopher Young o Michael Giacchino. En concreto, la organización tiene ya cerrada la presencia en el festival de Aritz Villodas, autor del himno oficial de la asociación BSOSpirit, organizadora del festival.

Aritz Villodas nació en Portugalete el 5 de enero de 1976. Con cinco años inició estudios de solfeo y a los diez comenzó a tocar el piano. Actualmente trabaja en el campo de la ingeniería acústica, sin olvidarse de la composición. Ha creado varias obras, casi todas para piano o en formato midi. Ha escrito la música de cortometrajes como Ondas paralelas (2003), Pa ti pa siempre (2003), First Minute (2003), Un héroe de acción (2004) o Perpetuum Mobile (2006), por el que fue finalista a los premios Jerry Goldsmith en la categoría de mejor música en cortometraje de animación. Trabajó en el largometraje Ellos son noche (2002) y en 2008 se ha estrenado la película No me pidas que te bese porque te besaré, que contiene algunas melodías de gran elegancia y belleza y que han llamado la atención en el conjunto de la ópera prima cinematográfica de Albert Espinosa.

Además de su faceta como compositor y pianista, también ha realizado trabajos como orquestador, arreglista e ingeniero de sonido. En su página web oficial (http://www.aritzvillodas.com/) puede conocerse mejor a este compositor, estrechamente vinculado al Festival.

Os adjunto un enlace de un vídeo promocional realizado por la organización del Festival relativo al nuevo invitado: http://vimeo.com/4351066.

Por otra parte, la distribuidora Aurum ha estrenado en los cines españoles el pasado viernes Ponyo en el acantilado. La nueva película del veterano director japonés Hayao Miyazaki fue un éxito de taquilla en el verano de 2008 en su país de origen, recibiendo los halagos de la crítica. Los aficionados a la música de cine han esperado expectantes el estreno de Ponyo en el acantilado, ya que la banda sonora original de este filme está compuesta por Joe Hisaishi, una de las estrellas de mayor relevancia invitadas al V Festival Internacional de Música de Cine ‘Ciudad de Úbeda’.

En la dirección http://www.play.com/Music/MP3-Download-Album/4-/8972637/Ponyo-on-the-Cliff-by-the-Sea/Product.html se puede disfrutar de parte de los treinta y seis temas compuestos por Hisaishi para esta banda sonora, algunos de los cuales se escuchará con seguridad en el concierto de los compositores que tendrá lugar en el marco de la V edición del festival ubetense y cuyo plazo de inscripción para los interesados como congresistas permanece abierto. Más información en el sitio web del Festival http://congreso.bsospirit.com/. También os adjunto un enlace al vídeo promocional realizado por la organización sobre la presencia estelar de Joe Hisaishi en Úbeda 2009: http://www.vimeo.com/4325392.

jueves, 23 de abril de 2009

Darth Vader quiere cobrar

Debe ser ingrato grabar con letras de oro en la historia del cine el nombre del personaje al que encarnas y quedarte en el anonimato al aparecer en pantalla ataviado con un traje que oculta tu rostro o tu físico. Uno de los más malvados del celuloide de todos los tiempos es Darth Vader, personaje tan oscuro como atrayente de la saga de La guerra de las galaxias y para mí casi el principal protagonista. Porque si Vader no llega a decir aquella frase de "Yo soy tu padre" en la mejor cinta de la saga (El imperio contraataca), George Lucas no hubiera podido continuar con su megalómeno folletín. La frase lanzada a Luke Skywalker por, teóricamente, David Prowse, ha quedado para los anales de la historia del Séptimo Arte.

¿Por qué apostillo lo de 'teóricamente'? Porque el actor que encarnó a Darth Vader, además de ser el claro ejemplo de intérprete que ha padecido lo que comenté al inicio, no escuchó nunca su voz en Star Wars, ya que George Lucas consideró que su tono no era lo suficientemente oscuro como para interpetar vocalmente el papel, así que lo sustituyó por James Earl Jones sin que le dijera nada a Prowse. Al menos así lo asegura el actor que, por aquellos años setenta, ya empezaba sus trifulcas con George Lucas. Y las broncas continúan treinta años después de que David Prowse se haya visto en pantalla con una voz ajena.

En estas semanas, Prowse ha manifestado que lleva años esperando que el director de la saga y su productora le abone los derechos que le asisten de taquilla por hacer el papel. La historia es sencilla: Ni Lucas ni Prowse (ni nadie) imaginó el dinero que Star Wars iba a dejar en taquilla y estrenaron el filme con unos contratos cerrados en los que Prowse figuraba con un modesto salario por su papel. Tras el éxito de la película y lo que ya todos sabemos, Prowse renegoció sus condiciones para rodar las secuelas en sucesivos años y solicitó un aumento que Lucas abonó en lo relacionado con la primera cinta de la saga, pero nunca llegó a pagar lo correspondiente a El imperio contraataca y El retorno del Jedi. De manera que David Prowse reclama ahora lo que considera es su justo salario.

Curioso que Lucas, al que precisamente no le debe faltar el dinero, no le haya abonado esta cantidad a Prowse, un actor que realmente no hizo más cosas destacables en el cine y que antes de enfundarse el traje de Darth Vader era deportista halterofílico y por ello fue básicamente seleccionado, dado su físico. No se puede decir que Prowse se ha dado a conocer por encarnar a Vader y que realmente es él quien le debe todo a Lucas, ya que nos basta con preguntar a los millones de espectadores cinematográficos quién hizo el papel de Darth Vader y apenas los más frikis de la saga nos lo van a contestar. El gran público sólo vio traje negro y máscara y en España escuchó la voz de Constantino Romero. Y de hecho, David Prowse fue conocido por sus campañas de concienciación educativa y cívica hacia los niños, por lo que fue condecorado por Gran Bretaña, adquirió su fama en el ámbito deportivo y tiene un prestigioso gimnasio, además de realizar campañas contra el cáncer. Las malas lenguas hablan de su difícil carácter e incluso que cobra a 30 euros los autógrafos y las fotos, pero parece que ese dinero lo destina a estas campañas. Eso no lo sabemos con certeza y yo tampoco porque no he conocido, al menos por ahora, a David Prowse, que además anunció hace apenas un mes que sufre cáncer de próstata.

Más le valdría a George Lucas -director sobrevalorado donde los haya y uno de los millonarios de Hollywood más podridos de billetes- pagarle a Prowse lo que le debe.