
Aunque existe un abanico de medios escritos de prensa en la provincia gaditana, el rotativo del Grupo Joly apenas se ha despeinado en estos años con respecto al número de seguidores del que disfruta. Cuando el monopolio informativo se acabó fruto de los avances del periodismo y la necesidad social de mayor información, apareciendo otros grupos mediáticos que compitieron con el buque insignia de los Joly, era de prever que se produjera un descenso de ventas o convulsos movimientos en el seno de su empresa editora. Pero ni la crisis actual, afortunadamente, puede con él. Hay despidos candentes, como en otros muchos grupos empresariales del país azotado por la crisis, pero los datos del cuadro que os aporto nos hace llegar a la conclusión de que el lastre que sufre el grupo editor del diario gaditano y que le obliga a apretar el cinturón no nace precisamente en la redacción ni en los despachos de los comerciales de este medio, sino en las cuentas con números rojos que emanan los resultados de ventas, publicidad y presencia social de los periódicos que el Grupo Joly ha ido creando paulatinamente en otras provincias como parte de una estrategia de expansión en la que además no todos los miembros de la familia estuvieron de acuerdo. Algunos diarios tuvieron que irrumpir necesariamente ante el desmadre de este sector empresarial de los últimos diez años y que ahora, cuando llegan la vacas flacas, ha obligado a sentarse a los editores que antaño se enfrentaban crispadamente para establecer una coexistencia pacífica, reducir gastos y romper la cuerda por el lado más débil: las plantillas, los empleados.
Cierto es que los clientes potenciales de periódicos también sufren la crisis, pero no nos quedemos en las frías estadísticas del último EGM. En un par de horas podemos extraer unos datos de los que podemos emanar conclusiones que nos darán que pensar, independientemente de la principal que ya la he citado anteriormente a la hora de reflexionar sobre el talón de Aquiles de este importante grupo periodístico.
Un análisis de las estadísticas del EGM en sus tres oleadas desde el año 2000 nos servirá para comenzar a pensar. De hecho, y como bien se puede ver en el cuadro, estamos extrayendo datos de 27 oleadas, suficientes como para hacernos una idea. Y una sucinta mirada nos lleva a una primera conclusión: Diario de Cádiz (insisto, excluyendo el resto de periódicos del grupo incluso los otros dos provinciales, Diario de Jerez y Europa Sur) contabilizaba 142.000 lectores entre febrero y noviembre de 2000. Si las estadísticas del EGM reflejan que actualmente cuenta con 153.000 lectores, nos indica un incremento de 11.000 lectores. Y ese guarismo, en plena crisis de carácter brutal. Pero veamos las evoluciones de estos años...
El diario por excelencia de Joly alcanzó su pico más elevado en cuanto a número de lectores entre abril de 2006 y marzo de 2007, con una cifra de 201.000. Desde febrero de 2005 habían venido experimentando un aumento paulatino de lectores cuyo máximo exponente se dio entre octubre de 2005 y mayo 2006, con nada menos que 34.000 lectores más. Superar en doscientos mil el número de seguidores diarios era algo obviamente temporal, de manera que esta inusual subida vino a moderarse conforme avanzaron los años, y de hecho sólo entre octubre de 2006 y mayo de 2008, Diario de Cádiz pierde nada menos que 47.000 lectores. Una buena cifra para utilizarla demagógicamente por sus competidores... si no fuera porque si así lo hacen, están obviando la suma de los paulatinos incrementos que le hicieron llegar al pico anteriormente mencionado, de manera que este periódico llega a sumar la cifra de 70.000 lectores nuevos entre febrero de 2005 y marzo de 2007. Tras el 'calentón', los guarismos volvieron a su cauce, y las diferencias de lectores en los dos últimos años apenas ha sido testimonial. En noviembre de 2008 suma 155.000 lectores, pierde varios miles después, ahora los vuelve a recuperar,... hasta situarse en los 153.000 lectores que le da el EGM. Y si hacemos la media de los 27 sondeos, nos percataremos -tal y como refleja el cuadro- que la media de lectores de Diario de Cádiz en nueve años se sitúa en 147.777 personas. Es decir, casi seis mil menos de los que disfruta ahora. No está nada mal... Si alguien quiere seguir con las elucubraciones, le recuerdo que fue en septiembre de 2004 cuando Vocento apareció en Cádiz con La Voz. 161.000 lectores contabilizaba Diario de Cádiz por entonces, durante los siguientes meses sufre un leve descenso en este aspecto, pero desde febrero de 2005 hasta marzo de 2007 no para de ganar lectores hasta alcanzar su culmen en toda una década.
¿Conclusiones? Las cuentas no cuadran porque el respaldo de lectores, y con él de ventas, se pierde por otro lado. ¿Es entonces justificable que se produzcan despidos en la 'Gallina de los huevos de oro' del grupo?